CARACTERÍSTICAS DE LA RESERVA
1. DESCRIPCIÓN DEL AMBIENTE
A. Rasgos geográficos
El territorio está caracterizado por la presencia de volcanes (Ubinas, Pichupichu, Misti y
Chachani), hacia el oeste y por nevados (Chuccura y Huarancante), hacia el norte. Las
pampas o planicies altoandinas del Sur este de Arequipa y del norte de Moquegua,
forman la mayor parte del territorio. Son notorias también las cuencas altas de los ríos
Yura, Sumbay, Blanco, Chili, Andamayo, Colca, Tambo y Mollebaya; que junto con las
lagunas de Salinas y El Indio, y numerosos bofedales forman los cuerpos de agua.
B. Clima
Presenta temperaturas medias muy bajas que oscilan entre 2° C a 8° C, las mínimas
absolutas pueden llegar a los -18° C; el área de la Reserva presenta promedios anuales
de precipitación que varían entre 200 a 600 mm., que se presentan fundamentalmente
en los meses de enero a marzo; periodo en el que cae el 65% de las lluvias. Durante el
resto del año se producen heladas.
C. Componentes bióticos
En este territorio, como parte de la biota típica de la puna sudamericana, se presentan
seis unidades de vegetación (yaretal, queñual, pastizal – pajonal, tolar, matorral
desértico y bofedal), que son utilizados principalmente por los camélidos
sudamericanos y por aves terrestres y acuáticas, así como por carnívoros, anfibios,
reptiles y artrópodos en general.
D. Funcionamiento
En este ambiente los principales rasgos limitativos son la escasez de agua y las bajas
temperaturas, que son modificadas favorablemente por su interacción con la flora y la
vegetación, que atenúan las temperaturas bajas, cosechan, infiltran, almacenan y
regulan el agua, generando servicios ambientales (especialmente dotación de agua),
para las actividades humanas en la Reserva y en la ciudad de Arequipa.
El ambiente funciona de la siguiente manera: la lluvia es trasladada o transportada por
los vientos desde el altiplano boliviano – puneño y entre octubre y abril precipita en el
territorio de la Reserva; cayendo en los nevados y planicies, ya sea en forma de lluvia o
de agua sólida (granizo y nieve). Esta agua es cosechada por la vegetación de los
yaretales, queñuales, pajonales y tolares, que la retienen y disminuyen la escorrentía,
propiciando la infiltración y la depositan o almacenan en los bofedales y lagunas o en el
subsuelo, recargando la napa freática que luego origina los manantiales en las tierras a
menor altitud; ya sea que estén almacenadas en la napa freática o en los bofedales y
lagunas, el agua de las lluvias cosechada principalmente en el verano (diciembre –
abril), es liberada lentamente a lo largo del año, con lo cual se regula el ciclo hidrológico
de la Reserva, y se proporciona un valioso e irremplazable servicio ambiental a los
habitantes de la Reserva y de la ciudad de Arequipa (gráfico 1).
La flora y vegetación también proporcionan alimento, refugio y sitios para vivir a la
fauna silvestre y forraje para el ganado doméstico, leña, hierbas medicinales y otros
recursos para los pobladores de la Reserva; protege el suelo y proporciona deleite
estético y espiritual, por medio de los paisajes y ecosistemas que forma al integrarse en
unidades funcionales con la fauna y los componentes abióticos del ambiente. Este es
otro de los servicios ambientales invalorables e irremplazables que proporciona la reserva.